Una bomba sumergible es aquella es capaz de trabajar bajo líquidos, cumpliendo en esencia el mismo trabajo de bombeo que un equipo no sumergible, con la diferencia que, es más versátil, ya que al ser un equipo que, a pesar de ser eléctrico, puede trabajar bajo el agua, el motor se puede situar dentro del lugar que se desea bombear, siendo con ello ideal para el bombeo de agua de pozos, de tanques, para labores de alcantarillado, incluso existen bombas que trabajan bombeando combustible. No todas las bombas sumergibles tienen las mismas características, por lo que deben tenerse algunas consideraciones con base a sus necesidades de modo que pueda elegir el equipo más adecuado.

Potencia: la potencia de una bomba sumergible tiene que ver con el caudal que soporta, la inmersión máxima de uso óptimo, así como la presión de subida. Todo esto en conjunto tiene que ver con las necesidades del consumidor, pero afortunadamente la mayoría de los requerimientos son cuantificables, es decir, por ejemplo, si usted desea bombear agua desde un poso hasta un tanque, el tipo de maquina dependerá de la profundidad del pozo y el caudal requerido (que a su vez está en función de lo que se desea hacer con el agua).

Tipos de bombas sumergibles: podemos distinguir entre dos tipos de bombas sumergibles, las fijas y las temporales. Las primeras, se instalan dentro del pozo o cualquier otro lugar en donde se requiera tener una bomba trabajando constantemente, en pocas palabras, después de instalarse, toda su vida útil transcurrirá bajo el agua.

Las bombas sumergibles de carácter temporal por otra parte, suelen ser más potentes, pero solo trabajan durante un determinado tiempo (establecido en base al modelo y/o fabricante). Son utilizadas en tareas como mantenimiento de alcantarillado, inundaciones, movimiento de residuos líquidos industriales, entre otras tareas en las que no se necesita un bombeo fijo en el lugar, sino un equipo que bombee más rápido el líquido.

Vía: Dakxim México